viernes, 24 de enero de 2020

Disfrutar en pequeño grupo de nuestra visita al Molino de Sofío





Imagen de situación: En el centro, el camino de acceso ( en el último recodo, la fuente)  y el conjunto histórico y etnográfico. Por debajo del camino, a la izquierda, el grupo de cascadas El Romeral. Por encima ,a la derecha, la presa.

Al Molino de Sofío le hemos dedicado ya dos entradas anteriores en este blog: La número 3 que sirvió como reportaje periodístico para la publicación comarcal VIVA La Vega. Y la número 91, como punto de interés en relación con el agua, resultado de la catalogación para el proyecto Conoce Tus Fuentes, de la Universidad de Granada. 
http://www.conocetusfuentes.com/ficha_detalle_otros_tipos.php?id_fuente=807



Detalle de la cascada El Romeral









Vista panorámica desde las cascadas junto al talud






En esta tercera entrada nos detenemos aún más. Se trata del resultado de un paseo en solitario que realizo a aquel enclave un día invernal, sin prisas y deteniéndome y disfrutando de todo lo que se me pone a la vista. Es entonces cuando recuerdo la cantidad de veces que he venido al Molino de Sofío, siempre en grupos, la mayoría de las veces, con alumnos o grupos de amigos que me pedían que los acompañara, con compañeros senderistas...y dos veces con Vicente Casado García, "Vicente Sofío" para los puebleños, con el que tuve la suerte de conocer todos los pormenores de la vida y actividades de su familia en aquel enclave en el que se criaron sus tres hermanas (Antonia, Valeriana, Sofía) y él. Pero ha sido con Vicente o cuando he estado allí solo cuando he aprendido y disfrutado más de aquel entorno extrayendo la conclusión que bien merecería todo un estudio intersectorial y globalizado para alumnos de Primaria o Secundaria y público en general.


La fuente, ya seca, a los pies de un pequeño bosque de lentiscos hechos árboles

En esta entrada trato, pues, de algunos aspectos interesantes que nos dejamos atrás la mayoría de las veces cuando visitamos el Molino de Sofío. Serían:

- En el descenso del tramo final:
 . Las extraordinarias vistas panorámicas desde los recodos del camino, dignas de fotografiarse para el recuerdo.
 . El grupo de cascadas El Romeral a la derecha en la mitad de la bajada aproximadamente, por el regajo de escorrentías que nos acompaña en nuestro caminar. Nos llamarán  la atención en cualquier época del año, pues son un reflejo de lo que millones de años atrás pudo ser un reguero de lava volcánica, pero son una gozada si las contemplamos en plena actividad del regajo tras las lluvias.
 . La riqueza de rocas y minerales en este recorrido sobre todo cuarcitas, gabros esquistos (laminares, pizarras...) y las volcánicas de las cascadas...
 . La fuente que abasteció a la familia de Sofío Casado y su esposa Encarnación García con sus cuatro hijos así como a todas las personas que iban o volvían de allí desde antiguo: arrieros, cazadores, pescadores...en el último recodo de la bajada.
- Tanto en el descenso como en nuestro destino disfrutaremos así mismo de una variedad incalculable de flora mediterránea que nos alegrará los sentidos.

La presa en su estado más natural


Detalle del caz o cauce horadado en la roca próximo a la presa

- Una vez allí, aparte todo el conjunto histórico y etnográfico ( presa, dependencias, caz o cauce, pozos, rodezno, sala de molienda...) podemos recrear la vida del molinero y su familia, observar con atención cada una de las partes de un molino harinero, su funcionamiento...



Vicente Sofío explicándonos su vida en el Molino de su padre y anteriormente de su tío Vicente del Valle


Vicente en plena explicación del funcionamiento del rodezno y la sala de molienda






Detalle entrañable: Vicente nos enseña el asiento que utilizaba  siendo muy pequeñito sobre una piedra basáltica del río
mientras su madre lavaba la ropa

- En el río disfrutaremos de la presa, de los rápidos y de sus grandes rocas basálticas que en el entorno del rodezno o molino propiamente tienen tonalidades verdosas.
- Si tenemos tiempo suficiente, antes de volver podemos acercarnos unos 400 metros río abajo, a media ladera,  a observar la desembocadura del arroyo del Infierno en el Retortillo en el bello paraje de fresnos donde se celebraba la antigua romería de la Virgen de los Remedios de El Collado, y un poco más abajo, el cauce y restos del molino harinero de Aurorilla.



Desembocadura del arroyo del Infierno en el Retortillo

Paraje de la celebración de la antigua romería de la Virgen de los Remedios






























Otro enlace que ofrezco:
http://www.conocetusfuentes.com/ficha_detalle.php?id_fuente=12729



jueves, 16 de enero de 2020

Recapitulación: Entradas 88 a 109 ( en orden inverso al que aparecen)

109.- Personas vinculadas con La Puebla de los Infantes y Peñaflor ( 2ª parte)
108.- Vínculos: La Puebla de los Infantes y Peñaflor (1ª parte)
107.- Paisajes de agua (IV). El Huerto del Moro
106.- Elogio de la vida saludable
105.- Eva Bravo Barco, Diputada del PSOE en el Parlamento español
104.- La hospitalidad de La Puebla de los Infantes
103.- Al encuentro de los ancestros puebleños de La Dehesilla en el solsticio de verano de 2019
102.- El tesoro de La Puebla de los Infantes
101.- De blanqueo
100.- Un pueblo encantador
99.- Paisajes de agua (III). Los característicos pozos embovedados de La Puebla de los Infantes
98.-Juan Núñez Guerrero, investigador de la Historia de reconocido prestigio
97.-Nuestra apuesta por el emprendimiento en agricultura y ganadería ecológicas puebleñas
96.- Palabras y expresiones puebleñas (II)
95.-Reconocimiento de La Puebla de los Infantes a su hijo Faustino Muñoz Soria
 94.- Curiosidades de la toponimia puebleña (I)
 93.- Paisajes de agua (II). Presa y embalse José Torán
 92.- Historias de dos emblemas puebleños: Retortillo y Torán
 91.- Paisajes de agua (I). Presa y Molino de Sofío
 90.- Una fuente, un manantial y un pozo
 89.- Recuperación y puesta en valor de un manantial de La Puebla de los Infantes
 88.- Recapitulación: Entradas 89 a 109 

domingo, 12 de enero de 2020

Personas vinculadas con La Puebla de los Infantes y Peñaflor (2ª parte)


En esta segunda parte acerca de los vínculos entre, por orden alfabético,  La Puebla de los Infantes y Peñaflor  mostraremos lo que pretende ser un sencillo botón de muestra, en principio de varias personas, con la única condición de que hayan dejado una estela para la historia cercana a nosotros, o para la intrahistoria puebleña, pues conocemos en la época medieval, sobre todo, personajes dueños de señoríos y conquistas en los dos municipios, pero creo que con lo expuesto sobre la historia de la primera parte es suficiente.
 Es indudable que puedan existir más personas del último o últimos siglos que se consideren vinculadas a los dos pueblos y hayan dejado alguna estela para la historia; es por lo que dejamos esta entrada abierta a la información y opinión que nos llegue de los lectores del blog de manera que podamos incrementar la relación con alguna persona más.
De las que aquí trataremos son, por orden cronológico: D. Evaristo Hinojosa Espada y su hijo D. Enrique Hinojosa Núñez, D. Vicente del Valle y D. Blas Infante.

D. Evaristo Hinojosa Espada era natural de Peñaflor, pero en el Archivo Municipal de La Puebla aparece en 1879 como dueño de olivares y terrenos de labor ( el Cortijuelo, la Cantera, Hatillo, Medina, dehesa de El Monte, Piedras Blancas, Pileta, Matachel y tres pedazos de tierra en la Solana de Matachel) viviendo en una casa de la calle Genaro Martínez. Se inicia con él, pues, la saga de la familia Hinojosa en La Puebla.


Cortijo de San Enrique en la dehesa de El Monte, de principios del siglo XX

Su hijo, D. Enrique Hinojosa Núñez, también de Peñaflor, se instala también en La Puebla construyéndose una gran casa frente a la puerta lateral Este de la iglesia parroquial de la Virgen de las Huertas. Fruto de su matrimonio con Dª Ana Santana Rodríguez, también de Peñaflor, tendrían una descendencia de 9 hijos.  Llegó a reunir muchas posesiones,  se nos dice que llegaban prácticamente desde el Molino de Sofío hasta la Fuente de la Mujer. La finca matriz o al menos la más identificativa de esta familia fue siempre el Cortijo de San Enrique ( por el nombre de su dueño) o del Monte, de dehesas y olivares, en uno de los cuales se construiría incluso una almazara (Molino de San José), que tras prestar servicio a la familia le fue arrendada a un francés, un tal “Douamec”, por lo que fue conocido desde entonces en el pueblo como “molino de Domeq”.


D. Enrique Hinojosa Santana, médico de Bollullos del Condado, introductor de la penicilina en Andalucía

De los 9 hijos de este matrimonio, los dos que han llegado a conocerse más fue D. Diego Hinojosa Santana, Secretario del Ayuntamiento de Peñaflor durante el periodo republicano que llegaría a obtener el título de Hijo Adoptivo de Peñaflor. Se conserva aún su casa en la calle Raimundo Martínez (Mesones); y el tercer hijo D. Enrique Hinojosa Santana, médico de Bollullos del Condado desde donde  fue pionero, introductor e impulsor,  del uso de la penicilina en toda Andalucía, pues le había ayudado a salvarle la vida a un hijo suyo. Se le recuerda también como un buen médico atento a sus pacientes que incluso llegó a perder la vida como consecuencia de una bronconeumonía que le produjo el contagio de una virulenta gripe asiática por no querer dejar de atender a sus pacientes aquejados de esta enfermedad. Los Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Huelva, Córdoba y Sevilla le rindieron homenaje en La Puebla con una cerámica conmemorativa en la fachada de la casa familiar el 9 de marzo de 2012.


Antigua presa o azuda de Peñaflor en el río Guadalquivir para producción de energía eléctrica

D. Vicente del Valle, viene a trabajar a la fábrica de harina de Peñaflor que se fundó y comenzó su actividad en 1878 a raíz de la llegada del ferrocarril a esta localidad y que en casi un siglo de historia con algunas pausas en su actividad siempre había contado con la energía hidráulica del Guadalquivir para la electricidad que necesitó ( cuyo excedente llevó la luz a Peñaflor y La Puebla). Bien por los avatares de las crecidas del río en invierno en las que había que interrumpir la actividad harinera, bien por el espíritu emprendedor de nuestro personaje, adquiere en la primera década del pasado siglo XX el pequeño terreno circundante del antiguo molino del Agrimensor, lo restaura y mejora sus instalaciones, siempre con la ayuda de su sobrino Sofío Casado del Valle, y comienza su actividad como autónomo harinero para La Puebla de los Infantes en 1910. A la muerte de D. Vicente del Valle, hereda su propiedad su sobrino Sofío, de ahí el nombre con el que conocemos aquel paraje espectacular.

Panorámica del Molino de Sofío
















Vicente Casado Ruiz nos explica emocionado su vida en la actividad molinera de su familia

Sofío Casado del Valle y su esposa Encarnación García, tuvieron cuatro hijos: Valeriana, Antonia, Sofía y Vicente, a los que todos conocemos, particularmente a este último, al que se comprende que le pusieron el nombre del tío pionero de la actividad harinera del Retortillo y conocido en el pueblo como “Vicente Sofío” que llegaría a ser el último molinero a la muerte de su padre hasta que en los años sesenta decide mejorar su vida yéndose a trabajar a la fábrica de cerveza Cruzcampo de Sevilla.


Vicente Sofío explicándonos cada una de las partes desde la presa hasta el rodezno

Por Vicente y sus hermanas que se criaron en aquel lugar, hoy emblemático y señas de identidad de La Puebla, conocemos los avatares  que tuvieron que soportar con las crecidas del río Retortillo que suponían un volver a empezar la mayoría de las veces. O los tiempos difíciles de la Guerra Civil y la posguerra, con la satisfacción para la familia de que contribuyeron a mitigar el hambre del pueblo en aquellos tiempos difíciles.


D. Blas Infante: No es este el lugar para glosar una figura histórica de la grandeza de este hombre, pues sería interminable, solo quisiéramos referirnos al paso de D. Blas por Peñaflor y por La Puebla de los Infantes; pero por respeto y reconocimiento a su persona haremos una breve  referencia sobre él: Nació en Casares (Málaga) el 5 de julio de 1885. Notario de profesión, escritor ensayista y político conocido por su condición de ideólogo del andalucismo. Hombre sensible al sentir de los pueblos y de la Andalucía profunda y en palabras de su nieta Mª Jesús, de Lora del Río, a la que hemos escuchado muchas veces hablar de su abuelo “también defensor activo de la Naturaleza”. El final de su vida fue muy trágico pues fue fusilado por los sublevados por sus ideas sin juicio ni sentencia el 11 de agosto de 1936 en Sevilla en los inicios de la Guerra Civil Española, hecho luctuoso que cada año se recuerda en el lugar de su muerte por diversas instituciones andaluzas. En abril de 1983 el Parlamento de Andalucía le reconoció como Padre de la Patria Andaluza en un acto de justicia histórica por lo determinante que fue su trayectoria vital y el legado de su obra en el proceso autonómico andaluz.


D. Blas Infante en su casa de la Alegría en Coria del Río. Sostiene un zorro amaestrado por él que probablemente se le regalara siendo un cachorro en La Puebla de los Infantes

D. Blas toma posesión de la notaría de Cantillana en 1910 y se desplaza a  pueblos de su influencia a ejercer su cargo, entre ellos a Peñaflor, donde conocería a Dª Angustias García Parias con la que el 19 de febrero de 1919 contraería matrimonio en una capilla de la casa familiar sita en el actual número 30 de la calle Juan Carlos I ( calle Largo). Al poco tiempo de dicho matrimonio tomaría posesión de la notaría de Isla Cristina ( década de los años veinte), hasta 1931 en que consigue la de Coria del Río donde se construirían para su ya familia numerosa de 4 hijos su famosa casa de la Alegría, hoy convertida en museo de la Autonomía y la Historia Contemporánea de Andalucía.
Se constata, por tanto la vinculación de D. Blas con Peñaflor, y también con La Puebla de los Infantes. Quizás por su amor a la Naturaleza y por su carácter sociable se conoce acerca de sus visitas al cortijo de Las Villalonas de la familia Parias de Peñaflor, al cortijo de San Enrique o del Monte en La Puebla al que fue invitado varias veces por la familia Hinojosa Santana (esta familia le tenía ofrecido así mismo un despacho en su casa frente a la iglesia parroquial para que ejerciera sus funciones de notario cuando viniera a La Puebla) sabemos también de su amistad con la familia López Hinojosa dueños de El Tejero y obviamente nos lo imaginamos por alguna de las propiedades que desde antiguo tuvo la familia Parias en el término de La Puebla: La Adelfa, camino de Constantina o la Sierra El Lobo. 
Pilar del cortijo El Monte. Más abajo el merendero en la huerta donde más de una vez se le vio a D. Blas leer y escribir

Debemos hacer notar, por ultimo, que hemos coincidido alguna vez vecinos de Peñaflor y de La Puebla con escrituras de propiedad de nuestras casas escritas de puño y letra por D. Blas Infante en su etapa de notario en Cantillana.

Nuestro agradecimiento por su colaboración para esta entrada a Antonio Hinojosa Toro,por sus referencias familiares; a Juan José Toribio por la foto antigua de Peñaflor y referencias del Archivo Municipal de La Puebla; y a Mª Jesús Naranjo Infante, nieta de D. Blas Infante, por su información de la faceta de su abuelo como gran amante y defensor activo de la Naturaleza, así como por la foto de D. Blas en la casa de la Alegría.