martes, 4 de abril de 2017

Juan Rangel Martínez ha hecho realidad su sueño

     Es muy importante perseguir algún sueño en la vida, proponerse metas posibles que le den sabor e impulso a buena parte de lo que hacemos. Con independencia de otras dificultades que se te pueden presentar, el enemigo principal de la persecución de los sueños suele ser el miedo. De ahí que todo el mundo no tenga la oportunidad de llegar a conseguirlo. En el caso que nos ocupa, el joven Juan Rangel Martínez, de La Puebla de los Infantes, está empezando a ver hecho realidad su sueño.

Juan en el aeródromo de la empresa en la que trabaja en la actualidad

        A Juan  tuve la suerte de conocerlo y tratarlo como alumno en la E.S.O.: muy buena persona, formal, trabajador, buen compañero,...aunque callado y difícil de arrancarle una conversación salvo si al toque de timbre para el recreo, se le preguntaba algo en relación con la aviación o los ultraligeros que era un deporte que ya practicaba con su padre y otros aficionados del pueblo. Y es que Juan, desde pequeño ya tuvo el sueño de volar, o mejor, de pilotar un avión como ya lo hace;  un sueño que le ha ido suponiendo un gran esfuerzo a él y a sus padres, ya que ha conllevando unos estudios, entrar en la escuela de pilotos, en su caso en la de Córdoba, durante 4 años; por tanto, una inversión económica importante, un nivel de idioma, una gran cantidad de horas de vuelos, de las que lleva realizadas ya unas 1500, para llegar a lo que ya es hoy: Piloto Comercial. Y es que en esto de llegar a ser piloto, y esperamos verlo algún día como comandante de aeronave, nadie le va a regalar nada, salvo la ayuda de su familia, todo se lo va a tener que trabajar por si mismo.

Juan con 9 años escuchando las orientaciones de Pedro Jiménez y su padre sobre el ultraligero

Hola, Juan, ¿cuándo nace en ti tu afición por el vuelo?
Cuando yo nací, ya había en mi casa más de un aeromodelo puesto que mi padre, Juan Rangel Gómez, fue en un tiempo aficionado al aeromodelismo, y  yo lógicamente desde muy pequeño lo acompañaba a hacerlos volar. Con el paso del tiempo él tuvo la afición del vuelo en ultraligero y cuando un día me dio un paseo en él siendo todavía pequeño, ya tuve claro que esta actividad “era lo mío”.

Háblanos de tu trayectoria de pequeño con tu padre y sus amigos…
Recuerdo  a lo largo de mi infancia mi ilusión por que llegara el fin de semana para ir con él y sus amigos, también aficionados, Pedro Jiménez Sánchez, Antonio Carmona Anguita sobre todo y otros, y poder dar una vueltecita  con algunos de ellos en el ultraligero. En una  fotografía que te facilito, muy ilustrativa  de aquella época, aparezco entre Pedro y mi padre con ocho o nueve años, recibiendo orientaciones de los dos en torno al ultraligero. Durante mi adolescencia también probé en más de una ocasión el vuelo en parapente y paramotor, actividades típicas de La Puebla, nuestro pueblo.


Juan en plena actividad agroforestal

¿Qué haces en la actualidad?
Quizás por mis orígenes de proceder de zona rural o por haberlos visto desde pequeño sobrevolando los cielos de nuestro pueblo, me ha gustado desde siempre lo que se denomina aviación agroforestal ( tratamientos en cultivos, lucha contra incendios…), actividad que me encuentro desarrollando a día de hoy, si bien he trabajado también en  vuelos de fotografía aérea realizados por toda España, Portugal e Italia. Así mimo he trabajado en instrucción de vuelo.
¿Cómo llevan  tus padres los trabajos de aviación que estás desarrollando?
Mi padre, como buen aficionado que es al vuelo, que todavía lo practica en el ultraligero, sabe que yo me estoy desenvolviendo en el medio de transporte más seguro de todos, tanto por sus sistemas  duplicados como por  sus exhaustivos controles de mantenimiento. De hecho considero más peligroso, por ejemplo, desplazarme en coche por la ciudad  hasta el aeródromo, que el vuelo que tenga que realizar  ese día.


Juan acompañado por su padre en un vuelo

Entre las fotos que conocemos tuyas de vuelos ya te hemos visto pasear a tu familia. ¿Cómo ha sido? ¿Qué ha supuesto para ti?
Compartir con ellos lo que sé hacer es para mí una gran satisfacción. Y me consta que a ellos les gusta que lo hagamos de vez en cuando. A veces incluso  han sido ellos los que me lo han pedido. También tengo muchas fotos con amigos sobrevolando el pueblo o el embalse José Torán.

¿Y el futuro?
  Estoy contento con la actividad que desarrollo en la empresa en la que trabajo, que me ofrece  trabajos agroforestales, lucha contra incendios, transportes, etc. Y por ahora mi futuro lo veo en esta empresa.



Damos las gracias por su colaboración a Juan Rangel Martínez, para la realización de este reportaje en el que hemos intentado poner de manifiesto, y nos alegramos enormemente por ello, que este piloto puebleño  siendo tan joven se esté abriendo camino en una actividad soñada por él toda su vida; sobre todo si tenemos en cuenta la situación laboral de los jóvenes en nuestro país. Pero damos fe de ello, que se ha debido a su sueño desde pequeño, a la suerte de tener unos padres, Juan y Toñi, dispuestos a ayudarle incondicionalmente cuando lo ha necesitado y a unas cualidades y esfuerzo personales de su parte.