Tras
otras artesanías de La Puebla tratadas en este blog : de la pleita, la vareta, las
maderas, la talabartería, el encaje de bolillos, los dulces caseros, la calera
y la cal, el carbón vegetal, los huertos, los hornos de los campos, las fuentes, los pozos…le
toca ahora el turno al jabón casero, “el de siempre” que diría Anita Grueso,
que junto con Isabel Castaño lo vienen fabricando al unísono desde hace tiempo,
como un recurso que, aparte su significado:
el reciclaje del aceite vegetal usado, la ayuda mutua o la
autosuficiencia que les supone a ellas y que tuvieron nuestros antepasados
frente a la dependencia que padecemos
ahora, el resultado no puede ser mejor tanto para la higiene personal como para
la ropa, especialmente para la ropa blanca.
Materias primas y útiles para la fabricación del jabón |
Hemos quedado en la casa de Anita con patio, almacén y corral con muy buenas condiciones que facilitan todo el proceso de la fabricación del jabón.
Las
dos vecinas funcionan muy coordinadamente y tienen a punto todo lo necesario.
En esta ocasión las materias primas me dicen que son:
-
15 litros de aceite usado ( oliva y girasol)
-
15 litros de agua templada
-
3 Kgs. de sosa cáustica, o “barrilla”
(1 Kg. por cada 5 litros de aceite)
(1 Kg. por cada 5 litros de aceite)
Se
vierte todo en un cubo,en este caso grande de plástico, y se va moviendo siempre
al mismo ritmo en el sentido de las agujas del reloj hasta que se espese, que
ocurre al cabo de una hora y media aproximadamente, por lo que una persona va turnándose con la otra y entre las dos
es más llevadero el proceso de mover la mezcla.
Esta, una vez espesada, la vierten a continuación sobre cajas de
poliespán, de las que utilizan los pescaderos, a las que previamente se les ha
abierto unos agujeritos por donde debe rezumar la barrilla. En este estado de
endurecimiento deberá estar unas 24 horas, pasadas las cuales se procede a su troceado según
el tamaño que se desee. Se puede hacer con un cuchillo grande o mejor incluso
con un alambre fino tensándolo sobre el bloque de jabón.
Finaliza
todo al cabo de unos 20 días de secado a lo largo de los cuales se irá poniendo
blanco, dispuesto para ser usado.
He aquí un botón de muestra de costumbres que no deberían perderse en el pueblo como tantos otros procesos, como el de conservación de vegetales y hortalizas de los huertos por ejemplo, que aparte el sentido de la autosuficiencia y el reciclaje nos supondrían utilizar productos mejores y más naturales y saludables que los que compramos.
Muchas
gracias a Anita y a Isabel por su colaboración al haber hecho posible este
reportaje sobre autosuficiencia en La
Puebla de los Infantes.