jueves, 6 de mayo de 2021

Una planta de nuestro término municipal que nos causa impresión . Curiosidades de nuestra flora (5)



Pitas por La Canteruela

Efectivamente se trata de la pita, una planta extraña, exótica, enigmática...porque en cualquier momento nos pueden atrapar con sus pinchos o porque puede ocultar extraños animales refugiados en ella. Cuando nos las encontramos por los campos nos da la impresión de que estamos en un paisaje árido y misterioso. En nuestro término municipal se da la variedad más frecuente, la grisácea y grande, por la zona del entorno de El Santo o en el camino del Molino de Sofío por La Canteruela, si bien como plantas ornamentales podemos encontrar en el pueblo y en casas de campo o jardines otras variedades como la pita amarilla grande y otras más pequeñas y de otros coloridos.


Pitón de poco tiempo a primeros de mayo


La pita o agave, de la familia agavaceae, término grecolatino que se refiere a “admirable” es una planta perenne, suculenta ( carnosa, de tallos y hojas gruesas) originaria del Norte de México con una enorme diversidad de especies. Probablemente se introdujo en la Península Ibérica desde el siglo XVI. Resiste muy bien la sequía y los terrenos áridos y necesita mucho sol. Florece una sola vez en su vida, aproximadamente a los 14-15 años, cuando la planta tiene entre 7 y 30 años, por medio de un tallo largo y robusto conocido como pitón que hace que la planta muera (monocarpismo), si bien se reproduce de manera más frecuente a través de hijuelos que nacen de los rizomas o raíces de la planta, que suelen ser muy largos para captar la mayor cantidad posible de agua, que se encontrará almacenada en las hojas como reserva para la floración por medio del pitón, que curiosamente crece 1,5 m por semana pudiendo alcanzar hasta 12 m. de altura. El fruto se encontrará en forma de cápsulas con semillas negras, aplanadas y muy numerosas. Tras la floración la roseta o pedúnculo que ha emitido el tallo florífero muere.


          Cuerdas de fibras de  pita


                               Pitón  florido en las inmediaciones del cerro Peñascoso o del Repetidor


La variedad más frecuente en Andalucía siempre fue la conocida como pita o agave americana gris con largas hojas o pencas con espinas en sus bordes y la terminal más larga y recta. Se plantaba normalmente en linderos tanto de fincas como para señalar caminos o en lugares rocosos e improductivos y entre tantos beneficios que se extraen de ella ( en México, por ejemplo, tequila, cerveza…), aquí se recuerda sobre todo el de la extracción de sus fibras para fabricar guitas y cuerdas, los porqueros solían utilizarlas en sus látigos para hacer más ruidos y arrear a los cerdos; así mismo  sus vástagos o pitones se utilizaron como vigas para estructuras de chozos, para   escaleras y para pequeñas construcciones como cobertizos y gallineros… Con un trozo o rodaja del pitón se obtenían asientos, también se podían vaciar y utilizarlos para fabricar canalones, tambores…y con la roseta o receptáculo del pitón en la actualidad son famosos los timbales que fabrica un artesano en Benalup-Casas Viejas (Cádiz).









 Variedades ornamentales de pitas


Sobre otras curiosidades diremos que en La Puebla existía una zona, lo que hoy es la prolongación de la calle Barrero, conocida desde antiguo como cortinal de Las Pitas, pasando este nombre al callejón de salida a la carretera de Lora y Constantina. No sabemos por qué motivo se cambió a Callejón de los Pitos, que produjo con el tiempo las correspondientes quejas de los vecinos al Ayuntamiento. Por esta circunstancia, le dediqué al tema una coplilla en las imágenes de intrahistoria puebleña ( la nº 22, entrada 47  del blog “La Puebla de los Infantes, un pueblo encantador” que dice:

                                El Callejón de “ Las Pitas”

                                un guasón cambió por “Pitos”

                                y como era natural

                                se quejaron los vecinos

 En nuestro pueblo existe también el dicho de "Estar detrás de las pitas" como reproche al que está resguardado, viéndolas venir sin dar la cara, queriendo pasar desapercibido sobre algo que incumbe a la colectividad.                              

 Otra curiosidad sobre esta planta es la adivinanza: “¿ Cual es el hijo que al nacer mata a su madre?" Respuesta: "El pitón, que cuando sale  la planta se seca”.




















Artesano de Benalud-Casas Viejas (Cádiz) que obtiene magníficos timbales con la roseta que se seca  al salir de ella el pitón